A lo largo de la vida hemos tenido una pareja con la cual no estamos cómodos pero que de una u otra forma terminamos la relación, pero ¿qué pasa con las personas que no pueden terminar a pesar de todo?

Existen muchos factores que pueden afectar en la decisión de finalizar la relación, los motivos principales que podemos identificar son:

  1. Temor a la soledad: A pesar de la incomodidad el “sentimiento” de no encontrarnos 100% solos nos protege haciéndolo la principal razón para continuar.
  2. Dependemos emocionalmente de la pareja: Este tipo de personas involucradas en lo que se llama “una relación tóxica” no pueden imaginarse lejos de su pareja a pesar del descontento ya que sin su pareja no podrían soportarlo.
  3. Simple orgullo: Para no darle la razón a otra persona o por el esfuerzo que le tomo concretar la relación les “motiva” a seguir adelante.
  4. La inversión pesa: El tiempo con el que llevan con su pareja pone un peso en la relación ya que han durado tanto tiempo que genera un confort el cual no es sencillo abandonar y la única opción viable para ellos es continuar.
  5. Dependen económicamente de la pareja: Puede parecer dura la realidad pero cuando una pareja debe de retomar la vida de soltería prefieren mantener la relación por conveniencia.
  6. No hacer daño a la pareja: Se encuentran consientes de la situación en la que se encuentra la relación pero permanecen así para no cargar con la culpa que trae una ruptura.
  7. No querer caer en la realidad: Como cualquier persona que se enfrenta a una situación difícil no quieren darse cuenta de que la relación que tuvieron se acabó, les cuesta dejar ir debido a los recuerdos y prefieren continuar sin ser felices.