Bridger Walker, un pequeño que vive en Estados Unidos, se interpuso entre ella y el animal, recibiendo así varias mordidas en la cara y cabeza
Por proteger a nuestros seres queridos haríamos lo que fuera, incluso arriesgar nuestra propia vida.
Un gran ejemplo de ello lo puso un niño de seis años que defendió a su hermanita del ataque de un perro.
Bridger Walker, un pequeño que vive en la ciudad de Cheyenne, Wyoming, Estados Unidos, se interpuso entre ella y el animal, recibiendo así varias mordidas en la cara y cabeza. Por si fuera poco, tras el ataque mantuvo la fuerza y corrió con su hermanita para ponerla a salvo, de acuerdo a lo relatado por su tía en redes sociales.
Sus padres los llevaron al hospital, donde el cirujano plástico le puso 90 puntos en la cara el pasado 9 de julio.
Lo que más llamó la atención fue lo que les dijo el pequeño cuando contó lo sucedido: ‘si alguien tenía que morir, debía ser yo’.
Amamos a nuestro valiente y queremos que todos los demás superhéroes sepan sobre este último héroe que se unió a sus filas”, finalizó la tía.
En cuanto a los dueños del perro, la familia de los menores indicó que no guardan rencor hacia ellos, pues se han hecho cargo y han sido muy amables con el niño.
Con información del Excélsior