Come proteína
“Comer gran variedad de proteínas bombeará a tu cuerpo de aminoácidos generadores de colágeno,” dijo Whitney Bowe M.D. asistente dermatológico de la clínica Icahn School of Medicine at Mount Sinai. “Sabemos que las mujeres que no obtienen suficiente colágeno pueden desarrollar una piel áspera y pálida, así como un pelo más delgado y uñas quebradizas.” Asegúrate de consumir diariamente  46 gramos de proteína, puedes obtenerlas en caldo de hueso, pescado y pollo. Y, si eres vegetariano, ¡no te preocupes! Con una dosis extra de garbanzo, frijol y soya lo lograrás.

 

Controla las hormonas
Evita la leche de vaca ya que contiene estrógenos. Ésta hormona aumenta el % de grasa, causa inflamación intestinal y por eso sale acné. Prefiere leches vegetales de arroz, coco o almendra. Intenta consumir productos orgánicos libres de hormonas y antibióticos.

Protégete
Ayuda a tu piel neutralizando la pérdida de colágeno con un súper plato de frutas y verduras llenas de antioxidantes. Además, de acuerdo a un estudio realizado por la revista American Journal of Clinical Nutrition, una dieta rica en vegetales verdes puede reducir el riesgo de cáncer de piel hasta en un 54%. La manera de preparar los alimentos también cuenta, los vegetales ricos en vitamina C como el brócoli, kale y los pimientos deben ser salteados lo lo suficiente para estar calientes sin que pierdan su color y dureza. Los antioxidantes de la zanahoria, como el betacaroteno y el licopeno, son más potentes al cocinarlos con una grasa saludable, utiliza aceite de oliva extra virgen.

Sana tu intestino
Los dermatólogos afirman que la inflamación intestinal desencadena reacciones como acné, rosácea y envejecimiento prematuro. Balancea tu cuerpo con algas, vegetales, frutos rojos y sopa miso. Experimenta probando la kambucha, un té fermentado que te proporcionará probióticos.

Olvídate de los azúcares y carbohidratos refinados
No solo estamos hablando de la repostería que todos conocemos. El arroz blanco, el pan, la pasta y los bocadillos empacados pueden elevar la glucosa de la sangre en menos de 15 minutos. Esto provoca que, dentro de tu cuerpo, se active la proteína encargada de la inflamación, la cual es la posible responsable de la aparición de acné, rosácea y eccema.

De acuerdo a Rajini Katta; MD, asistente clínico en Baylor College of Medicine in Houston, la elevación de la glucosa en la sangre puede endurecer las fibras de colágeno, haciendo que tu piel pierda elasticidad y firmeza. Así que obtén tu dosis de carbohidratos altos en fibra y bajos en azúcar de alimentos como el arroz salvaje y pasta de amaranto o quinoa en lugar de pasta blanca. Al hacerlo reducirás la inflamación de tus glándulas e intestino y, en menos de 10 semanas, verás los beneficios de esta dieta para la piel.

Elige grasas saludables
Los ácidos grasos omega-3 se encuentran en pescados de agua fría como salmón, atún y sardinas. De acuerdo a Jessica, M.D asistente clínica del Instituto Dermatológico de la Universidad del Sur de California, estos alimentos son ricos en DHA y EPA, componentes que alivian acné severo y moderado. Comer pescado cuatro veces por semana o tomar suplementos con Omega-3 o incluir aguacate y aceite de oliva en tus comidas va a transformar tu piel.