Mia Blatova tuvo una idea para celebrar su cumpleaños número 30  y lo hizo de una manera muy original.

Mila decidió que era un momento para llorar el regalo más preciado y que jamás regresará: la juventud.

La chica prometio que a sus 30 espera tener nuevas aventuras, viajar y cuidar a sus hermosos niños.