El aspecto más importante para la reducción del peso corporal es el metabolismo. Cuando se realiza dieta de no comer o dieta de hambre, el metabolismo (el ritmo al cual usted quema calorías) se hace más lento. Cuando usted utiliza un método apropiado cambiando hábitos y jamás pasando hambre, el metabolismo se acelerará.
El ejercicio cardiovascular o aeróbico acelera aún más su metabolismo y lo convierte en una máquina de quemar calorías.
Hay varios caminos para realizar este entrenamiento. El correr o trotar es el más común y económico, pero, si usted sufre de sobrepeso marcado u obesidad, esto va a poner mucho estrés sobre sus articulaciones. Caminar a paso rápido es un método más seguro. La manera correcta de obtener los máximos resultados con la menor cantidad de tiempo y esfuerzo involucrados, se logra con el sistema de intervalos.
A nivel de gimnasio, el uso de una caminadora, colocando al principio una inclinación de al menos 10 grados y poco a poco elevarla hasta 30 grados, le dará un gran entrenamiento, con un mínimo riesgo de lesión y con mucha seguridad. Siempre asegúrense de usar un excelente calzado apropiado para soportar el impacto.
Bicicleta estacionaria y su prima la elíptica son excelentes opciones para entrenar sin poner esfuerzo de impacto en nuestras articulaciones. ¿No tiene máquinas ni acceso a un gimnasio?
No hay problema. Subir y bajar escaleras o al menos dos o tres escalones funcionarán a la perfección. Levántese de la cama y entrene por su salud y buena calidad de vida.