Los padres de familia desean ser valiosos como padres, como proveedores y como ejemplo a seguir. Y es que cada vez más, sin importar el nivel de esfuerzo, las respuestas más recurrentes a la hora de buscar comunicarnos con nuestros hijos son: “casi nunca te veo”, no me entiendes” o “es mi vida”, limitando la relación.

 

Empero, sin importar cuán deteriorada esté la conexión, a partir de hoy puedes comenzar a tomar decisiones que ayuden a generar oportunidades de comunicación con tus hijos, fortaleciendo el vínculo emocional entre ambos y el sentido de familia.

¡Mejora la convivencia!

Si deseas construir lazos aún dentro del caos, estos 5 elementos te permitirán equilibrar la relación y acercarte a tus hijos.

1. Guíalo con un interés personal: Nadie se interesa por ti hasta que tú no te interesas por ellos. Si quieres que tu hijo te escuche, primero debes escucharlo tú a él. Muéstrale un real interés por ayudarlo a lograrlos. Nadie se cierra ante aquel que quiere apoyarlo a convertir sus metas en realidad.

2. Guíalo con precisión: Los límites dan seguridad y estructura a los hijos. Nunca confundamos ausencia de disciplina con sinónimo de amor. Tú eres quien establece las reglas (sin ir a los extremos, ni hacerlo de forma agresiva). Esta claridad en la comunicación evitará conflictos.

3. Guíalo con consecuencias: Para los hijos jóvenes, su independencia es su mayor interés, dales libertad. Es decir, ayúdalos a responsabilizarse haciéndoles saber cuáles son las consecuencias de sus actos y cúmplelas cuando se presente la ocasión. Esto les permitirá a ellos tomar mejores decisiones.

4. Guíalo con seguridad: Déjalos elegir en situaciones que tú consideres seguras y respeta sus decisiones.

5. Guíalo con tu ejemplo: Muéstrales valores, confianza y amor para que ellos tengan un parámetro a seguir cada vez que se dirijan a ti. Verás la diferencia.

La mejor forma de vincularse sanamente con los hijos, sin importar su edad, es procurando que amor y el respeto sean los elementos principales de la comunicación. Si se logra esta maravillosa combinación, no habrá momento para propiciar conflictos.