El cuerpo humano es fascinante. Sin embargo, TODO lo que puede hacer sigue siendo un misterio. Los investigadores siguen descubriendo cada vez más al respecto, pero tal vez nunca lleguemos a comprenderlo al 100%.

Por ejemplo, si te duele la cabeza o las articulaciones antes de una tormenta, ¿sabías que es la forma de tu cuerpo de predecir cambios en el clima? También puede alertarte a los peligros del ambiente o si estás a punto de conocer a alguien importante.

Las cosas que haces regularmente no parecen la gran cosa, pero tu cuerpo te está diciendo más de lo que estás escuchando.

Tu hígado puede regenerarse:

El hígado es el único órgano interno que posee la habilidad de regenerarse, como si fuera una estrella de mar. Esto puede suceder en respuesta a la extirpación quirúrgica del hígado o después de una lesión química como una sobredosis.

Tan sólo un 25% de la masa hepática original es suficiente para regenerarse a su tamaño completo en cuestión de semanas. Increíble, ¿no?

Puedes llegar al orgasmo ¡haciendo ejercicio!

Así como lo lees: hay personas que pueden llegar al orgasmo con el ejercicio. Cuando realizas ejercicios que aprietan y contraen los músculos abdominales, también estás trabajando los músculos del suelo pélvico.

La contracción de estos músculos, más la liberación de endorfinas durante el ejercicio pueden provocar el clímax. De hecho, en el 2012 un estudio en el Diario de Terapia de Relaciones y Sexo descubrió que casi la mitad de las mujeres han experimentado un clímax inducido por el ejercicio.

Puedes microdormir:

Parpadear es un reflejo involuntario que la mayoría tomamos por sentado, a pesar de que lo hacemos 20 veces por minuto. Pero no sólo sucede para mantener los ojos limpios, sino que ofrece lo que se conoce como ‘micro-siesta’, una recarga involuntaria para los ojos.

De hecho, las micro-siestas o micro-sueños ocurren más de lo que probablemente pienses. Se definen como ‘episodios breves e involuntarios de inconsciencia’ cuando tienes sueño, pero estás luchando para mantenerte despierto. Estas micro-siestas duran entre 1 y 15 segundos. 

Tus intestinos pueden influir en tu estado de ánimo tanto como el cerebro

No por nada dicen que el tracto intestinal es el segundo cerebro. Hay neuronas que recubren el intestino, así que el estómago no sólo digiere, sino que también está entretejido con el sistema nervioso.

Es por eso que cuando estás nervioso, puedes sentir molestias intestinales. Y se le llama segundo cerebro por su capacidad para influir en el estado de ánimo de las personas. 

Puedes reír para mitigar el dolor:

La risa sí es la mejor medicina. Cada vez que reímos, nuestros cuerpos liberan endorfinas que actúan como analgésicos naturales. De hecho, un estudio del 2019 descubrió que la risa social está relacionada con un umbral elevado de dolor. Esto se debe a que la risa actúa para disminuir las hormonas del estrés como el cortisol, e incluso puede ayudar a disminuir los sentimientos de depresión y ansiedad.